el otro día había una chica en el veterinario en frente de mi con una como tus pequeñines, era preciosa, una toy, te miraba con unos ojillos listejos, y no le daba nada de miedo Neo, ni ladraba ni nada más maja, estaba tan tranquila, Me dió corte pedirle que me la dejara, si llega a ser tuya no me hubiera cortado.